Vecinos que trabajen en sanidad NO queremos”, reza la triste leyenda que anónimamente pegaron en un edificio de la capital correntina. Allí viven un enfermero, una técnica en laboratorio y una técnica en diagnóstico por imágenes
Tristemente la pandemia también saca lo peor de nosotros como sociedad. Primero fue la quema de basuras a una médica correntina que trabaja en Resistencia. Después fue la estigmatización a la enfermera del San Marcos que ejerce en una clínica privada de la capital chaqueña y se contagió covid-19.
Ahora, la discriminación se instaló cobardementente anónima en el edificio ubicado por Avenida Pujol 2358. Allí residen tres trabajadores de la salud, un enfermero, una técnica en laboratorio y una técnica en diagnóstico por imágenes que se encontraron con la agria bienvenida de sus propios vecinos en un cartelito en un espacio púbico dentro del complejo habitacional.
“Da mucha bronca. Siempre tratamos de ayudar, y en lo personal lo hago desde siempre. . Yo tomo todas las precauciones para resguardarme, a mí y a mi familia, y a todos los vecinos”, contó Flavia en diálogo con una radio correntina.
“Resulta que a las 9 de la noche salen a aplaudir… y después hacen eso. Entonces ¿en qué quedamos?”, se preguntó y luego agregó: “esto habla de la miseria humana, que suele aflorar en estos casos”.